Ciudad de México.
Año
2004
Casa Santa Cruz
Un sistema de muros francos en planta baja nos conduce por un pequeño patio al vestíbulo, que es, en realidad, una cámara central estrecha y oscura, la casa está pensada para el descubrimiento, así que los muros, la penumbra, nos conducen por un lado hacia un espacio bajo (el comedor) pero muy profundo, pues frente a él se abre un jardín de sombras espesas a manera de túnel flanqueado por muros de tabique rojo entretejido, al otro lado de la cámara, un espacio de la misma proporción pero el doble de altura se abre al cielo y a un patio que el mismo muro que nos condujo fue dibujando, pero que nunca nos dejó ver, ni siquiera intuir el espacio que al otro lado se encontraba, es la estancia que se abre a un patio inundable de 7 x 7 m flanqueado por muros, es en realidad un patio, fuente, espejo de agua.
El resto de la casa, las recamaras, se alojan en un prisma suavemente depositado sobre los muros de la planta baja, en donde se reproduce nuevamente la idea del patio.